lunes, 11 de mayo de 2020

Música para respirar en la vida

Técnica Alexander para Músicos en confinamiento (COVID-19)
Anne Landa

“A way of coordinating the system better, being quiet and alert.”
(Ted Dimon, lecture on 29th of April ´20)

La Técnica Alexander aporta herramientas psicofísicas para que el sistema del músico trabaje de un modo eficiente, con la interacción de cuerpo/mente pero subrayando un aspecto muy amplio que es el comportamiento humano.
En este periodo tan  delicado, podemos observar y analizar la actitud del músico en su estudio diario. A través de herramientas prácticas de una materia educacional, como es la técnica Alexander, desarrollamos un trabajo concreto para nuestras acciones precisas con el instrumento, centrándonos en el estudio del movimiento del músico y su “thinking in action”.
En este periodo de confinamiento puede ser interesante centrarnos en nuestro Control Primario y subrayar que esa relación natural de la cabeza/cuello/torso, es una estructura que mantiene su largura natural cuando el uso del individuo es el adecuado (el uso que tenemos desde que nacemos; ya que el buen uso de nuestro control primario es innato).
Intentemos recordar que la dirección de la cabeza hacia delante ayuda a la apropiada largura de toda la musculatura de la espalda. De modo que si respetamos el cómo está diseñado el cuerpo para el movimiento, el funcionamiento de éste será más libre y eficaz.
Pero además de este buen uso general a nivel físico (que todo músico puede respetar para evitar sobrecargas y mejorar a su vez el sonido),  creo que un aspecto a destacar en este periodo de “stop” general, es el relacionado con el sistema emocional del individuo y su relación con el propio instrumento.
Estos días de confinamiento y aislamiento social nos han llevado a un día a día donde el tempo se ha ralentizado muchísimo. Este día a día en “Adagio”, nos ofrece una posibilidad de entender claramente el principio que desarrollamos en técnica Alexander: PARAR antes de reaccionar ante el estímulo. STOP durante el estudio (desde el calentamiento) nos ayudará a estar “aquí y ahora”. Parar y pensar para emitir con control consciente.  Estudiar con eficacia, pero sin prisa, porque el tempo ha frenado y podemos mejorar nuestro vínculo con el instrumento.
El vínculo con el instrumento tiene mucha relación con nuestra actitud: 
¡la actitud que el músico tiene en cada momento puede ser una elección consciente!
¿Te has fijado con qué actitud te pones a estudiar cada día?
Del mismo modo que durante el parto y nacimiento la oxitocina es una de las hormonas más importantes (porque es la hormona del amor y del vínculo con el bebé) y el pico más alto de oxitocina en la vida de la mujer es en el momento del parto, cuando por ejemplo abrazamos a alguien también segregamos oxitocina.
Ahora que no podemos abrazar…pensando en hacerlo, simplemente pensándolo, la oxitocina estará ahí como cuando se lleva a cabo la acción.
¿Por qué no utilizar entonces el pensamiento, en este caso pensando por ejemplo en un abrazo, para que gracias a esta hormona maravillosa podamos crear un verdadero vínculo con nuestro instrumento?
Porque en mi opinión, ser músico va más allá de tocar notas…
Nuestra música nos puede ayudar a mantener una sonrisa interna y segregar oxitocina, propiciando un bienestar en nuestro organismo y en el que nos escucha. Oxitocina y vínculo, como el de una madre con su bebé, y menos adrenalina y cortisol.

Música para vivir con amor.